Comenzaba a oscurecer, y yo seguía cureoseando por todo el bosque y preguntándome si volvería a mi antigua vida. Sé que lo que estaba viviendo en esos momentos era mil veces mejor que el mundo anterior. Ahí no había humanos, los repudiaba con todo mi ser (Yo era la única humana ahí), noimportaba cuantas cosas lindas hicieran por conservar el planeta, no importaban las bellas palabras que salían de la boca de los enamorados, para mí todo era falso, todo estaba muerto, no existía el amor verdadero. Aquella vida era como una rosa marchita, seguiría siendo una flor a pesar de que estubiera muerta, seguiría siendo vida aunque no la viviera.
Las primeras estrellas hacían su aparición con la Luna. Subí a la copa del árbol más alto para poder observar el cielo nocturno que tanto amaba. Me recosté en la rama que podría soportar mi peso durante toda la noche. No quería dormir, después de todo nunca había tenido la oportunidad de estar así en la noche. Era la primera vez que repiraba aire extremadamente puro, en la que el sonido de los coches no arruinada el panorama y que no había intrusos que dijeran que era tiempo de irse a casa.
El dulce aroma del bosque comenzó a arrullarme, y fui cerrando los ojos con la esperanza de no estar de regreso en el pasado al despertar. Que comodidad.
-"Arrulo que juega con brisa, la música es tu sonrisa, mi alimento, tu pecho, tu vida, un instante de luz, la partida" - cantaba con mis ojos cerrados y mis brazos colgando - ¿Cómo es posible que me acuerde de estas cosas, que me acuerde de aquella persona y no poder recordar quienes son ellos? - pregunté para mi misma en voz alta, segura de que nadie me escucharía.
- Te daría una respuesta si pudiera, pero por más que quiera no puedo hacerlo mi problema - sin darme cuenta el ocelote había trepado el árbol hasta donde yo estaba y puso sus patitas en mi frente.
- Tal vez eso no es ningún problema y yo lo convertí en uno... - no pude abrir los ojos, me estaba quedando cada vez más dormida - Pero, es mejor así. Es probable que existan cosas que no debo de recordar... Po ahora lo único que me interesa saber es porqué estoy aquí y cómo llegué.
Me era imposible mantenerme despierta, el sueño estaba por vecerme, y lo hizo un par de minutos después. El cielo nocturno desapareció para darle lugar a mis sueños.
El sueño comenzaba justo en el momento en el que desaparecí del mundo "real" (ya no sabía cual de los dos era el verdadero), tenía varios fierros atravesando mi corazón, pulmones y la parte baja del abdomen; mi cuello estaba tapizado por pequeñas piezas de vidrio. Habíamos chocado. Mis dos hermanos y mi madre estaban en perfecto estado, gracias a Dios, yo era la única herida, ni siquiera quién nos chocó tenía el más mínimo rasguño. Los policias (tránsito) se encargaban de interrogar a mi madre, y los paramédicos revisaban a mis hermanos. Yo todavía seguía en el auto, nadie me había notado, ni siquiera mí familia, que sabían perfectamente que yo iba con ellos. Preferí pensar que aún no me sacaban de ahí porque ya sabían que no podría sobrevivir, aunque yo me sentía bastante bien. Y en más de una ocación traté de llamar la atención de mi madre, pero no me escuchaba, y en cada intento fallido la vida se alejaba de mí cada vez más hasta matarme...
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